El aceite de coco orgánico tiene cualidades que lo hacen compararse con la leche materna, así como ésta, también fortalece el sistema inmunológico, nos ayuda a alcanzar y mantener el peso correcto, nos da energía, siendo fuente de vitaminas y minerales.
El aceite de coco, después de la leche materna, es la fuente más alta de la naturaleza en ácidos grasos de cadena medios (MTC), que aumenta el metabolismo y colabora a bajar el colesterol, por lo que cada vez más es utilizado en personas con hipotiroidismo o de metabolismo lento con excelentes resultados.
El ácido laureo contenido en el aceite de coco y la leche materna tiene propiedades antivíricas, antibacterianas, y fungicidas, es un ácido graso usado naturalmente en el cuerpo humano para destruir virus tales como VIH, herpes, cytomegalovirus, gripe, varias bacterias como las que producen la gastritis, las bacterias que causan infecciones por alimentos (monocytogenes de listeria) y algunas parasitosis intestinales.
El aceite de coco a través de los años ha sido comúnmente utilizado en la industria cosmética, en la alimenticia y de forma casera. Entre sus múltiples beneficios se encuentran:
Usado sobre el cabello o la piel
- El aceite de coco nutre el cabello y lo pone brillante y suave. Puede usarse poniéndose el aceite de coco derretido sobre el cabello y dejarlo 20 minutos. Después lavarlo. Recupera los cabellos maltratados, teñidos, etc.
- Estimula y fortalece el crecimiento del cabello y lo mantiene libre de caspa.
- Utilizado comúnmente en la cosmética ya que equilibra el PH de la piel, da elasticidad y suavidad natural. Previene y ayuda a eliminar estrías, ya sea solo o mezclado con otros ingredientes.
- Ayuda a eliminar las manchas de la cara (paño).
- Puede usarse en pieles secas o áreas resecas como los talones o rodillas para suavizarlas. Se utiliza tal como una crema corporal. Es muy grasoso por lo que hay que usar sólo unas gotas.
- Hidrata y refresca la piel cuando hay ardor o quemaduras leves por sol.
- Mejora el aspecto de la piel de naranja combinado con limón dando masajes circulares.
Al consumirlo
- Aporta acido fólico, vitamina B y minerales como calcio, magnesio, fósforo y potasio.
- Acelera la actividad inmune favoreciendo el no uso de medicamentos contra enfermedades.
- Actúa reforzando el sistema inmunológico, previniendo así muchas enfermedades.
- Equilibra el sistema nervioso actuando como relajante físico y mental.
- Brinda energía calórica en forma de grasa de fácil asimilación.
- Elimina el sobrepeso acelerando el metabolismo y la asimilación de los alimentos.
- Estimula la sana función tiroidea reduciendo problemas del hipotiroidismo.
- Previene la osteoporosis, embolias y enfermedades relacionadas con la presión.
- Favorece la prevención de enfermedades cardíacas ayudando a reducir el colesterol.
- Protege las células del corazón evitando el endurecimiento de venas y arterias.
- Ayuda a controlar la diabetes equilibrando los niveles de azúcar en la sangre.
- Reduce el riesgo de cáncer y otras condiciones degenerativas.
- Disminuye los síntomas de la menopausia y el síndrome pre-menstrual.
- Aumenta el rendimiento físico vigoroso y reduce la fatiga.
- Resulta ideal para las personas a las que se le ha extirpado la vesícula biliar.
- Ayuda a absorber el calcio de los alimentos.
- Ideal para emplearlo en la cocina ya que es un aceite que no se oxida al calentarlo. Se puede utilizar normalmente para freír, guisar y hornear los alimentos, puede sustituir la mantequilla, margarina y aceite tradicional de cocina por aceite de coco.
El mejor aceite de coco es el aceite 100% orgánico, Kosher, virgen, hecho de frutos de palma de coco (cocos nucifera), certificado como orgánico y prensado en frio. Cuando no ha sido refinado conserva sus propiedades puras. Conserva su olor y color original. No contiene conservadores, ni colorantes. Se solidifica a temperaturas menores de 24°C y no requiere refrigeración después de abierto. Este tipo de aceite es verdaderamente una ambrosía de la naturaleza.
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